La Guardia Civil ha denunciado a un vecino de la localidad cántabra de Ampuero, de 32 años, que fue sorprendido en una operación contra el furtivismo de caza al abatir ilegalmente dos corzos, un macho y una hembra, según informaron hoy a Efe fuentes de la Subdelegación del Gobierno en Palencia.
La época de precintos de rebeco finalizó el día 15 de noviembre y la persona denunciada carecía de los mismos para abatir esta especie y únicamente portaba un precinto para un ciervo.
Los hechos se iniciaron cuando los efectivos de la Guardia Civil, ubicados en diferentes lugares estratégicos, dentro de un coto privado de Caza situado en el término municipal de Velilla del Río Carrión (Palencia), observaron la presencia de un vehículo sospechoso, ocupado por dos personas.
Una de ellas, portando una mochila y un rifle descendió del turismo, permaneciendo la segunda en su interior.
El portador del arma efectuó cuatro disparos, abatiendo dos ejemplares de rebeco que dejaron en el lugar, para a continuación descender de una colina, recoger sus pertenencias y abandonar inmediatamente el lugar con el vehículo.
Inmediatamente se localizó e identificó a las personas que participaron en el hecho y se han formulado las correspondientes denuncias para su remisión a la Delegación Territorial de la Junta de Castilla y León en Palencia, por diversas infracciones a la vigente Ley de Caza en Castilla y León.
Además, se intervinieron y decomisaron los trofeos de caza, los cuales fueron recogidos por los guardias civiles en el lugar donde habían sido abatidos. EFE 1010563
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